Una vez más la torre de Tandil llega a la final del US Open
- María Candela Orrego
- 18 sept 2018
- 3 Min. de lectura
Hace 9 años todos los argentinos celebraban la victoria de un joven tandilense de tan solo 20 años en la US Open 2009. Tras la victoria en semifinales de Rafael Nadal, el gran vencedor, el argentino Juan Martín Del Potro, sorpresivamente se impuso al suizo y le arrebató el título que había sido 5 años consecutivos ganado por Roger Federer. Es imposible no recordar estos hechos a una semana después de la final del US Open 2018.
Nueva York. La semifinal se repite, Rafa Nadal o “El matador” (como le dicen en su España natal) se enfrenta a Delpo de vuelta. Tras 2 sets finaliza el partido con un grito victorioso por parte del tandilense y Nadal debe retirarse por problemas en la rodilla. Esto solo significa una cosa, el tenista de 29 años deberá prepararse para enfrentar al serbio, Novak Djokovic.
Ambos tenistas amigos se batieron a un partido que ponía nervioso a cualquiera verlo. Viéndolos nadie pensaría por todos los problemas físicos que pasaron, por parte del argentino varias operaciones de la muñeca izquierda y meses sin tocar una raqueta, por el lado del serbio una operación de codo. Y la banda amiga de Del Potro alentó más que nunca esta final de tres horas y dieciséis minutos en el Estadio Arthur Ashe.
La banda del balcón que alentó en todos los partidos de este torneo al gigante de 1, 98m son sus 12 amigos del colegio de Tandil. Manuel, un integrante de la banda, contó que hacen las mismas cosas que cualquier grupo de amigos, sólo que a él lo disfrutan menos desde los 14 años porque su actividad lo hace viajar todo el tiempo. Por eso, lo disfrutan más cuando lo tienen cerca y sufren con él cuando toca sufrir.
Winnie, otro de los amigos, aclaró que es el primer viaje que pudieron hacer juntos, y que requirió de una logística especial: todos tuvieron que organizar para que sus vacaciones en el trabajo coincidieran con el torneo y es más, hacen vida de turistas ya que ninguno de los 12 había estado antes en Nueva York. Gonzalo agregó que no saben cuánto tiempo estará (Del Potro) en este máximo nivel, por lo que apenas pudieron lo hicieron. Aparte, todo fue consensuado con el jugador que dio su aprobación para que sus amigos vayan a su torneo favorito. Manuel dijo también, que su amigo les pidió “que no hagan lío” en presencia de periodistas. Cosa que fue imposible: pasar inadvertidos por la prensa mundial.
“Están haciendo este torneo muy especial para mí. Pero sobre todo es especial para ellos, que es la primera vez que tienen la oportunidad de vivir lo que vivo yo, de cómo son estos torneos y de cómo me trata la gente acá, y que es difícil de explicar.”, dijo en la rueda de prensa el ahora cuarto del mundo.
Todo el partido el gigante de Tandil estuvo acompañado por los gritos y aplausos de sus fans, por los “Deeeelpo, Deeeelpo” de sus amigos y así fue que peleo, sacó su “martillo” de drive y dio todo de sí a pesar de encontrarse con un Nole totalmente recuperado. El partido duró tres sets que finalizaron con un 6-3, 7-6, 6-3 Djokovic arriba y un Juan Martín sumido en lágrimas. Si bien el argentino no se pudo apoderar de otro título Grand Slam se llevó una magnífica final. “Estoy amargado por perder, pero si me tocaba perder, me alegra que Djokovic haya sido el ganador del torneo” y añadió “Es increíble estar de nuevo en una final después de tanto tiempo, en el que todos saben que es mi torneo favorito.” Agradeció a su equipo, a sus amigos y a la Argentina. Con una sonrisa cansada y las lágrimas aún en sus ojos finalmente Delpo dijo “Esta copa ya la tengo y hoy me llevo el cariño de toda esta gente.”
En la rueda de prensa, ya de vuelta en Argentina, el ídolo tandilense contestó un par de preguntas. Reconoce que este año ha evolucionado en muchos aspectos: la parte humana, la tenística, la mental y psicológica. Por eso, prefiere no anticiparse al futuro y “ver como se dan las cosas”. Dice que después de todas las lesiones que pasó, jugar al tenis es un privilegio sin importar como llegan los resultados. Y deja la puerta abierta para la Copa Davis, diciendo que “el día que planteen bien los calendarios y se sepan las condiciones de cada competencia, lo analizaré”. Por lo pronto, lo único seguro es que va a celebrar su cumpleaños número 30 este 23 de septiembre con su familia y amigos en Tandil.
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